Tradicionalmente, las pieles de paiche (Arapaima gigas) se han desechado ya que solo se aprovecha la carne para el consumo directo. Ante esto, existe una alternativa que puede mejorar el aprovechamiento del paiche y transformarlo en cuero de alta calidad mediante el uso de curtientes vegetales.
El especialista en Innovación y Transferencia Tecnológica del CITE pesquero Amazónico Pucallpa, Christiaan Errol Moreno Ríos, sostiene que desde antaño la industria del cuero ha enfrentado críticas debido a sus impactos ambientales y preocupaciones relacionadas con el bienestar animal.
Sin embargo, existe un potencial interesante para mejorar la sostenibilidad de esta industria, a través del uso de curtientes vegetales en lugar de productos químicos convencionales.
“Los curtientes vegetales, como sustancias naturales, son extraídas principalmente de plantas que se utilizan para transformar las pieles crudas en cuero resistente y duradero, por lo cual son sostenibles y respetuosos con el medio ambiente”, señala el especialista.
Agrega que al utilizar curtientes vegetales en el proceso de curtido de las pieles de paiche, por ejemplo, se logra un cuero de alta calidad con propiedades aceptables para la fabricación de prendas como billeteras, bolsos, correas, entre otros.
Los curtientes vegetales ofrecen una mayor resistencia al desgaste y a la humedad, lo que resulta en un cuero más duradero y resistente a la intemperie. Además, permiten obtener una mayor retención de color y un tacto más suave, agregando valor estético al cuero producido.
Además, de sus beneficios ambientales y estéticos, el uso de curtientes vegetales en el aprovechamiento de las pieles de paiche también puede generar oportunidades económicas para las comunidades locales en las regiones amazónicas.
De esta manera, la producción de cuero de paiche con curtientes vegetales puede convertirse en una actividad rentable y sostenible, proporcionando empleo y mejorando los ingresos de la población.
“Por todo esto, el aprovechamiento de las pieles de paiche mediante el uso de curtientes vegetales en la producción de cuero resulta fundamental como una alternativa sostenible y prometedora. A partir de ello se obtendrá un producto innovador, de calidad y amigable con el ambiente”, puntualiza Moreno Ríos.