Ante las heladas que azotan a los cultivos en las zonas altoandinas del Perú, estudiantes de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) crearon “Puyuyacu” o “manta de agua”, un sistema automatizado e inteligente capaz de crear un microclima superior a los 0 °C sobre los cultivos.
El dispositivo posee sensores de temperatura, humedad del suelo y del ambiente, así como la velocidad del viento, parámetros que lo convierten en una pequeña estación meteorológica que detecta la ocurrencia de la helada, a lo que se suma la conexión a un sistema de riego por microaspersión para dosificar el abastecimiento de agua a los cultivos en la medida necesaria para que crezcan adecuadamente.
Esta tecnología fue creada por Emilio Espinoza Hilario (Ingeniería Eléctrica), Roxana Yancan Barreto (Economía) e Isabel Salvador Rivera (Farmacia y Bioquímica).
“El riego por aspersión produce transferencia de calor del agua asperjada al medio ambiente. El riego es controlado en todo momento durante la ocurrencia de la helada, se maneja el tamaño de gota de agua, presión del caudal, temperatura obtenida sobre los cultivos entre muchas otras variables. Así podemos generar un microclima superior a los 0 °C “, indicó Emilio Espinoza.
Actualmente los estudiantes de la Decana de América han desarrollado un primer prototipo bajo un sistema amigable con el medio ambiente debido a que utiliza energía solar para todo su proceso. Además, la máquina podrá ser manejada a través del celular mediante una aplicación web.
Para fabricar esta máquina, los estudiantes tuvieron que aprender programación electrónica e impresión 3D. Tras adquirir los componentes, entre ellos placas de circuitos, batería y un panel solar para que el equipo sea transportable sin dificultad y no requiera de conexión eléctrica fija, se dispusieron a ensamblar el dispositivo y lo tuvieron listo en tres meses.
El prototipo demandó una inversión aproximada de 800 soles, sin considerar el sistema de riego por microaspersión, y puede durar hasta 15 años si se le brinda un periódico mantenimiento a la batería, que dura 2 años, y al panel solar, que puede durar hasta 30 años, que alimentan al sistema y garantizan su autonomía de funcionamiento
Para los sanmarquinos, atender dicha problemática debe ser una prioridad en el país debido al efecto en cadena que producen dichos fenómenos en los agricultores. “Si hay helada, no hay productos, sino hay productos, no hay ingresos y la situación financiera de los agricultores empeora duramente con la ocurrencia de estos fenómenos y se acentúa más en aquellos que no tienen otras fuentes de ingreso más que la agricultura. Es necesario tener políticas de estado que impulsen el uso de tecnologías para solucionar estos problemas”, puntualizó Isabel Salvador.