En la región San Martín, el Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana (IIAP) desarrolla un innovador proyecto biotecnológico basado en el uso de hongos benéficos para ayudar a mejorar la producción de cacao, que han permitido reducir el cadmio y plagas en el cultivo.
Para ello, han seleccionado cepas de Trichoderma, un microrganismo que posee propiedades benéficas para diversos cultivos agrícolas. Este tipo de hongo es antagonista con capacidad preventiva y de control biológico de diversos hongos patógenos, como la Monilia, que provoca importantes pérdidas en los cultivos de cacao.

“Cuando el cultivo no está muy bien manejado, se generan pérdidas por encima del 50 %, por lo que constituye un problema muy serio para los productores de cacao”, explicó el líder del proyecto, el Ing. ambiental José Cayotopa Torres a Agencia Andina.
Otra de las características positivas del Trichoderma es su acción estimulante del crecimiento y desarrollo vegetativo de las plantas, dado que coloniza las raíces y se introduce en los tejidos para generar hormonas que fortalecen su estructura y fomentan el buen desarrollo del cultivo, detalló.

Hongo anticadmio
Pero uno de los mayores beneficios identificados en el accionar de las cepas seleccionadas de este hongo es su capacidad para remover el cadmio, un metal pesado y nocivo para el consumo humano.
“El cadmio es un metal pesado que está en el suelo y que se puede incorporar a través de prácticas que no son favorables como el uso de algunos fertilizantes que tienen como aliado al cadmio”, afirmó.
La legislación peruana, normada por el Ministerio del Ambiente, establece como límite una concentración de cadmio de 1.46 partes por millón (ppm). “El promedio en la región San Martín es de 0.3 ppm, muy por debajo del límite establecido en la norma, pero cuando se hace un muestreo de las almendras del cacao, al parecer estas concentran el cadmio”, comentó.
Cayotopa Torres detalló que por esa razón es que el IIAP trabaja con estrategias biológicas que involucra a las cepas seleccionadas de Trichoderma, las cuales fueron sometidas a contaminación por cadmio con altas concentraciones que llegaron hasta los 250 ppm, a fin de medir su comportamiento.
Para determinar el impacto positivo de estas cepas de Trichoderma nativas de los cultivos de cacao se hicieron estudios y análisis en el Laboratorio de Fitopatología implementado por el IIAP en la ciudad de Tarapoto con el financiamiento del Gobierno Regional de San Martín. Luego se practicaron pruebas en vivero y, finalmente, se ejecutaron ensayos en los campos de cultivo de cacao para validar la acción del hongo benéfico.
“Hemos encontrado tres cepas de Trichoderma que en el ámbito del laboratorio remueven el cadmio por encima del 65 %. Con esos resultados, probamos en vivero con plantas de cacao a las que se aplicó el hongo benéfico y fueron sometidas a contaminación por cadmio. El resultado fue que registraron muy baja absorción de este metal. También hemos aplicado con éxito hongos benéficos a otros cultivos como café, sacha inchi y arroz”, indicó Cayatopa.

Impacto económico
El éxito en el uso del hongo benéfico Trichoderma postulado por el proyecto del IIAP radica, especialmente, en la reducción significativa de costos en el manejo de los cultivos, lo que impacta positivamente en la economía local y regional.
“La idea es que los productores, con esta tendencia de producir alimentos cada vez más saludables y orgánicos, incorpore los hongos benéficos y biocontroladores dentro de sus procesos de producción”, anotó.
Sostuvo que si bien existen en el mercado muchos protocolos que ayudan a reducir el cadmio en el terreno de cultivo, pero tienen un costo elevado. “Este proyecto ofrece una alternativa más económica a los productores de cacao de la región San Martín y puede replicarse en todas las regiones productoras de cacao del país”, subrayó.
Aunque la pandemia del covid-19 obligó a una suspensión de tres meses en el monitoreo para validar el protocolo en los campos de cultivo, Cayotopa indicó que el trabajo ya se retomó como parte de la reprogramación de actividades y continuará hasta fin de año. En el 2021 se publicarán los resultados finales del proyecto, dijo finalmente.
DatoEl cacao (Theobroma cacao L.) se cultiva en 16 de las 24 regiones del Perú, en los que más de 100 000 familias se dedican a su producción que genera 11 millones de jornales por año.