Hace tres semanas, un grupo de agricultores de distintos caseríos del valle de Nepeña en el departamento de Áncash, iniciaron la construcción de una trocha de 10 kilómetros, usando solo picos y palas para acceder a las aguas de la laguna del caserío de Racuaybamba, ubicado a 3600 metros sobre el nivel del mar, para regar sus sembríos.
Ante ello, la Municipalidad Distrital de Cáceres del Perú-Jimbe se sumó con el apoyo de un cargador frontal que empieza a moldear los primeros metros de la nueva carretera.
La idea es llegar a las lagunas para realizar trabajos de represamiento y garantizar el agua para la agricultura de consumo familiar y de exportación.
“Hemos visto en las noticias lo que están haciendo los productores y por eso estamos aquí ayudando con maquinaria pesada. La obra beneficiará todo el valle de Nepeña en la parte alta y baja”, afirma el alcalde Adelmo Peralta Zavaleta, que incluso exhortó a que otros alcaldes como el titular de la Municipalidad Provincial del Santa, Luis Gamarra Alor, y al gobernador regional de Áncash, Koki Noriega, a que se sumen al proyecto comunal.
La obra tiene como meta habilitar 10 kilómetros de camino que permitirán reducir el tiempo de viaje de 6 a 2 horas hasta donde se ubican las lagunas en la Cordillera Negra. Un ambicioso proyecto que exige convicción y capacidad organizativa de los agricultores de esa parte del país.
“Nosotros caminamos varias horas hasta donde están las lagunas y sufrimos mucho. La obra la iniciamos pocas personas, pero ahora me da gusto que más gente se sume”, remarcó Félix De la Cruz Luna, quien lidera la construcción de la carretera.
Esfuerzo y compromiso
La construcción de la nueva vía de acceso ha generado que los paisanos de los agricultores, que viven en otras ciudades, les manden víveres para alimentar a los trabajadores. Además, se ha realizado la donación de combustible para el funcionamiento del cargador frontal, pero todavía se necesita más apoyo.
“Estamos teniendo buenos resultados con la ayuda de algunas personas y autoridades, y eso nos motiva a ratificar nuestro apoyo y a seguir articulando todo tipo de apoyo”, comentó el director del Servicio para el Desarrollo Integral Rural (Sedir), Juan Cerna Espinoza.
Sedir, institución que brinda capacitación y soporte técnico a los pequeños productores, ha estado junto a los agricultores desde el inicio de la obra.
El presidente de la Junta de Usuarios del Sector Hidráulico Nepeña, José Salas, quien estuvo acompañado de su gerente técnico Juan Pablo Córdova, también señaló que “la nueva vía de comunicación facilitará el traslado hasta las lagunas y coordinaremos apoyo con todas las comisiones de regantes”.
Además, mencionó que el programa Sierra Azul, del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, ya ha priorizado la construcción de 10 cochas en el distrito de Jimbe y 14 en el distrito de Pamparomás.