La producción de más de 18 000 hectáreas de cultivo (entre mango, palto, maíz, caña de azúcar, entre otros) en el valle Nepeña, departamento Áncash, podría perderse si las vías de acceso y tramos de carretera no son habilitadas para que los agricultores puedan vender su producto.
A la fecha, un aproximado de 6000 hectáreas de cultivo en producción, mango y palto principalmente, se han perdido por las intensas lluvias y huaicos que han ocurrido en estas zonas. Así lo informó el gerente técnico de la Junta de Usuarios Nepeña, Juan Córdova Ramírez.
El distrito de Moro, Cáceres del Perú y Pamparomás llevan incomunicados cuatro días debido a que las vías de acceso han quedado totalmente destruidas. Sumado a ello los pobladores no tienen agua potable, comida, ni fluido eléctrico, e incluso algunos pobladores se quedaron solo con lo que tenían puesto.
“Hay varios caseríos que están aislados. La agricultura es lo que mueve económicamente a los distritos de Moro, Cáceres del Perú, Nepeña, Pamparomás y Samanco. Los agricultores quieren sacar sus productos y no se puede, solo cuando baja el caudal del agua se puede pasar caminando. Hay caseríos que no tienen ni agua para tomar”, señaló el gerente técnico.
A su vez, la distribución de agua a los campos de cultivo en el valle Nepeña no se está realizando debido a que la infraestructura hidráulica está dañada en un 100 %, incluso las obras que se hizo con Reconstrucción con Cambios están destruidas. Los sembríos también podrían perderse por la falta del recurso hídrico.
“Luego del Fenómeno El Niño Costero en 2017, la Junta Nepeña ha presentado fichas técnicas y ha solicitado en varias oportunidades la descolmatación y encausamiento de los ríos en la jurisdicción del valle ante el Gobierno Regional de Áncash y el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), pero no hemos tenido respuesta. (…) Por eso ha colapsado todo, los ríos, solo limpiaron unos cuantos tramos”, aseveró Juan Córdova.
El presidente de la junta Nepeña, José Salas Vidal, hace un llamado a las autoridades distritales, tanto como de Moro, Cáceres del Perú, Nepeña, Pamparomás y Samanco, a unificar esfuerzos para afrontar estos embates de la naturaleza y exigir al Gobierno Central la rehabilitación de las vías de acceso, canales y bocatomas.