Por Teobaldo Ardiles Torres
Un proyecto de Norma Técnica de Salud (NTS), que dicta los lineamientos y pautas para la fabricación y elaboración de bebidas alcohólicas vitivinícolas y sus derivados elaborada por la dirección general de salud, causa preocupación a cientos de productores de vinos y piscos a nivel nacional.
Según opinan especialistas en el tema y productores, esta Norma Técnica de Salud está mal formulada, tiene serios errores de forma y fondo, y de aprobarse conduciría a la desaparición de los pequeños productores y MYPEs vitivinícolas, si es que no se toman acciones rápidas con apoyo técnico y político.

Agregan que se ha dejado de lado las técnicas de proceso artesanal, tradicional y ancestral, que constituyen un factor fundamental para obtener buenos vinos y piscos como se hacía desde hace siglos.
En la revisión, se observa situaciones dirigidas más al contexto de fabricación industrial, no diferencian este tipo de producción, de los productores de mediana, pequeña y microproducción que en su gran mayoría son los productores artesanales de pisco en el Perú, pero con autorización de uso de la denominación de origen.
En el caso del pisco, desde sus principios de elaboración es un producto inocuo, pero se está tomando otros parámetros que corresponderían a otros procesos productivos de alimentos y manufactura, donde si existe riesgo alimentario.
A opinión del destacado investigador vitivinícola Karl Mendoza, este proyecto de NTS tiene serios errores de forma y fondo, se nota un «copia y pega» de otras normas de alimentos y vacíos legales que los especialistas serios y sin intereses particulares deberán evidenciar.
“Los productores deberían recibir el apoyo de las autoridades locales para cambiar el rumbo de estas políticas del Ministerio de Salud (Minsa). El Estado no tiene verdaderas políticas de valorización y conservación del patrimonio”, señala Karl Mendoza.
Agrega que además de los productores de pisco, más sensibles son los productores de vino artesanal de todo el país (La Libertad, Ancash, Lima, Ica, Arequipa, Moquegua, Tacna, Ayacucho, Apurímac, Cusco), al ser un producto que tiene un nivel de riesgo sanitario medio, les será muy difícil adecuarse a esta normativa y que de aprobarse en 90 % de productores de vinos desaparecerían.
Pero se abre una puerta de esperanza para ellos, pues, funcionarios de Digesa, atendiendo a los productores, intercambiarán opiniones vía Zoom mañana viernes 25 en aras de encontrar un entendimiento y adecuar dicha norma a la realidad.
