Por: Teobaldo Ardiles Torres
Por años la Estación Experimental Agraria “Donoso-Kiyotada Miyagawa” del Instituto de Innovación Agraria (INIA) de Huaral, Lima, fue blanco de personas inescrupulosas y ladrones que ingresaban a sus instalaciones, incluso llegaron a invadir parte del terreno para realizar sus propios sembríos.
El centro de investigación no poseía un cerco de material que lo aislara de predios vecinos, sólo existía un cerco vivo de plantas y árboles que fácilmente era vulnerado con el fin de extraer de sus áreas diversos productos como chala, frutas y plantones.
Frente a ello, el INIA Central, que dirige el Dr. Jorge Luis Maicelo Quintana, decidió hace unas semanas atrás iniciar con la construcción de un cerco perimétrico de postes de metal y con alambres de púas.
La barrera perimetral tiene una distancia de 4000 metros lineales, pero aún falta culminar un tramo de 1000 metros, aproximadamente, con lo que se podrá tener cercado las 148 hectáreas que cuenta este centro de investigación.
El Ing. Benedicto Chacón Ayala, director de “Donoso”, refiere que además de ello se ha retirado el cerco vivo y se ha construido una trocha carrozable paralelo al cerco, el cual permitirá tener una mejor vigilancia de sus instalaciones.