Por: Teobaldo Ardiles Torres
Las intensas lluvias registradas en los últimos días en la selva de la región Pasco, provocaron, el 29 último, el desborde de dos ríos ubicados en el distrito de Palcazú, provincia de Oxapampa, inundando a más de un centenar de viviendas, decenas de hectáreas de cultivo y piscigranjas, según el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) Pasco.
Ese día, tras varias horas de lluvias intensas, los ríos Iscozacin y Palcazú se incrementaron rápidamente y se desbordaron, causando severos daños materiales.
El alcalde distrital de Palcazú, Sr. José Panduro Durán, manifestó que las lluvias en esta arte del país se incrementaron fuertemente en los últimos y que, lamentablemente, en el sector donde nace el rio Iscozacin se produjo un alud a los que siguió el desborde de los ríos y afectando a gran cantidad de plantaciones de yuca, plátano, cacao y otros, piscigranjas, además de las viviendas en el sector urbano y rural.
Según las evaluaciones del COER Pasco el desborde, que va desde el Parque Nacional “Yanachaga-Chemellín”, afectó a las poblaciones de Playa Caliente, Pan de Azúcar, Alto Iscozacín, Puerto Herrera, Puerto Primavera, Las Lomas de Palcazú, además de Puerto Palcazú, este último no había registrado inundaciones hace 25 años.
Muchas granjas de ganados lucían inundadas, incluso, algunas de ellas con animales dentro de los corrales. Asimismo, las piscigranjas con paiches, pacos y gamitanas fueron inundadas y sus especies arrastradas por la corriente.
Para hoy (lunes primero de febrero), se esperaba la visita de diversas autoridades para la evaluación oficial de daños a viviendas y sectores productivos, según nos refiere el Sr. Jhon Chu Orrego, gerente de la Municipalidad de Palcazú, indicándonos que el 30 de enero y primero de febrero no hubo lluvias, lo que hizo que descendieran notablemente las aguas, pero que hoy existe la amenaza de fuertes lluvias.
Ahora el temor de los pobladores es que al bajar las aguas llegue la invasión de zancudos y con ello aumentar los casos de dengue que viene causando muertes en diversas zonas de la selva, incluso con cifras mayores a las del covid-19.